GIMP

24.03.2019

Un toque profesional a tus fotografías, sin tener que piratear programas ni comprarlos

En mi manía de querer compartir contigo todo lo que he aprendido sobre el ministerio, paso a detallarte algo que quizás no te han enseñado en el Seminario, pero que a mi criterio, te puede servir para darle un toque más profesional a tus fotografías, y es la existencia de este programa de manipulación de imágenes llamado Gimp.

La razón por la que te comparto esto, es porque la mayoría de nosotros, al salir al ministerio, no contamos con los recursos económicos para conseguir programas como el Photoshop, y al mismo tiempo, como ministros, no deberíamos piratearlos, aunque admito que la piratería en Argentina está tan arraigada que yo mismo, al principio la justifiqué. Sin embargo, con muy buen tino, un hombre de la iglesia me la cuestionó y fue allí que me sumergí en el mundo del software libre. Por eso quiero presentarte Gimp, que es totalmente gratuito y puedes descargarlo desde su página oficial para las plataformas más famosas del mundo: Windows, Mac o Linux.

Como habrás notado, nuestro blog (y hablo en plural porque somos varios los que trabajamos en él) tiene su propio canal de Youtube, y estoy planeando subir algunos tutoriales que te ayudarán para que usando Gimp más INKSCAPE, puedas tú mismo preparar tus propias tarjetas de presentación.

La verdad es que yo no sé manejarlo en profundidad, sólo lo uso para aquellas cosas que me ayudan a pulir mis tarjetas de presentación y folletos; sin embargo, en internet hay páginas especializadas, llenas de tutoriales para que lo puedas usar a nivel profesional. Puedes hacer cosas como cambiarle el color de pelo al modelo, o hacer parecer la foto más antigua, cómo hacer que la persona parezca más delgada, o más jóven, o cambiarle el maquillaje, etc.

Una vez me acerqué a un misionero de Paraguay y le pregunté qué cosas pensaba él, que necesitaría hacer yo, para prepararme mejor para ser misionero, pensando que me aconsejaría un seminario o unos buenos libros cristianos. Sin embargo, lo que me aconsejó es que estudiara albañilería, electricidad o carpintería. En su momento quedé extrañado, pero cada vez que tengo que hacer alguno de estos trabajos, me acuerdo de él. Fue un muy sabio consejo. Hoy, en la era del post modernismo, te digo que estudiar el manejo de estos programas de diseño, debe ser considerado por nosotros, como parte de nuestro trabajo. Al fin de cuentas, el diseño de una buena tarjeta de oración, folleto o invitación a cualquier reunión especial, puede hacer una diferencia. Si así no fuera, las grandes empresas no invertirían tanto tiempo y dinero en imagen y diseño. ¿No te parece?

Busca su página oficial, bájalo y estúdialo, verás cuánta utilidad le encuentras.