La Clave Para Vivir Tiempo Completo Del Ministerio
El secreto es que no hay secreto
Una de las cosas que he notado a lo largo de mi ministerio -y esto que te voy a decir se nota más entre los pastores nóveles- es que muchos buscan la clave del éxito; pero como bien diría un experimentado y "exitoso" pastor: "el secreto, es que no hay secreto". Es decir: todo está en la Biblia.
En mis más de 25 años de ministerio, salvo unos meses que me vi forzado a trabajar secularmente para sostener a mi familia, siempre he vivido del evangelio. Créeme que en Argentina, entre Bautistas, eso es todo un récord. Y es que siempre he escuchado miles de excusas por las cuales los pastores son bivocacionales, sobre todo porque las ofrendas nunca parecerían alcanzar para sostenerlo. Pero la verdad, es que no es así, y aquí va el "secreto":
DIOS SIEMPRE PROVEERÁ PARA QUE VIVAS DEL EVANGELIO
Sé que puedes llegar a pensar que lo que escribo no cuadra con la realidad, ya que cuando las cosas no salen como pensamos que deben salir, tendemos a adecuar las verdades bíblicas a la realidad circundante, adaptándola a nuestras circunstancias; es decir, que ante esta afirmación, si no se ajusta a nuestra realidad, estaremos agregando un "si pero ..." y ahí encontraremos todo tipo de ejemplos de por qué Dios no siempre provee para que vivamos del Evangelio. Sin embargo, creo que la Biblia rechaza con claridad la idea del pastor bivocacional y realza la importancia de que el Pastor viva enteramente del Evangelio. Observa qué dice la Biblia al respecto:
- "Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio." (1 Cor. 9:14)
En primer lugar, aquí encontramos una orden del Señor. Esta orden no está dirigida a la iglesia, sino a los predicadores, es decir: a los que "anuncian el evangelio", o como bien diríamos nosotros: a los que Dios llamó al ministerio. Los que hemos sido llamados al ministerio no podemos dedicarnos a otra cosa más que al llamado de Dios a anunciar el Evangelio. Las enseñanzas apostólicas son coincidentes con este pensamiento y reafirman la orden del Señor de 1 Corintios 9:14, veamos algunos ejemplos de esto:
2 Tim. 2:3: "Tú, pues, sufre penalidades como buen soldado de Jesucristo."
2 Tim. 2:4: "Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado."
2 Tim. 2:5: "Y también el que lucha como atleta, no es coronado si no lucha legítimamente."
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Tim. 2:6: "El labrador, para participar de los frutos, debe trabajar primero. "
2 Tim. 2:7: "Considera lo que digo, y el Señor te dé entendimiento en todo."
2 Tim. 2:8-13: "Acuérdate de Jesucristo, del linaje de David, resucitado de los muertos conforme a mi evangelio, en el cual sufro penalidades, hasta prisiones a modo de malhechor; mas la palabra de Dios no está presa. Por tanto, todo lo soporto por amor de los escogidos, para que ellos también obtengan la salvación que es en Cristo Jesús con gloria eterna. Palabra fiel es esta: Si somos muertos con él, también viviremos con él; Si sufrimos, también reinaremos con él; Si le negáremos, él también nos negará. Si fuéremos infieles, él permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo."
2 Tim. 2:15: "Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad."
Estas palabras están dirigidas a Timoteo, para que él a su vez, le enseñe a otros hombres el oficio pastoral. Las palabras en verde indican que el Pastor debe entender que para vivir del ministerio hay que estar dispuesto a trabajar, sufrir y pelear, procurando con diligencia presentarse ante Dios aprobado. Las palabras en rojo son claras en el sentido de que si vamos a anotarnos para el trabajo, no podemos enredarnos en los negocios de la vida. Pero las palabras en azul son interesantes, porque parecerían apelar a una enseñanza ya enfatizada por Pablo anteriormente: "Considera lo que digo" conlleva la idea de pensar, analizar, reflexionar, meditar. Si examinas los ejemplos esgrimidos por parte de Pablo en este pasaje, que son el del soldado, el atleta y el labrador, verás que son similares a los que usa en 1 Corintios 9: 6-14, especialmente el versículo 7. Nota entonces, que el pasaje en Timoteo está hablando del sostén del pastor, al igual que 1 Corintios 9. La razón por la cual digo esto, es que la figura del buey Pablo la usa en 1 Corintios 9:9 y en 1 Timoteo 5:18 (y no la vuelve a usar más), donde el contexto de este último versículo deja bien en claro que Pablo está hablando del sostenimiento económico del pastor o anciano y no de los misioneros. Lo interesante es notar que Deuteronomio 25:4 no fue escrito para los judíos, sino para los pastores de la iglesia novotestamentaria; Pablo lo aclara con todas las letras cuando dice que fue enteramente escrito por nosotros (1 Cor. 9:10), es decir: "Nosotros" los que anunciamos el evangelio. Pero éstos no son lo únicos lugares donde podemos apreciar que Dios desea que los que anuncian el evangelio, vivan de eso mismo:
3 Jn. 1:7 Porque ellos salieron por amor del nombre de El, sin aceptar nada de los gentiles.
3 Jn. 1:8 Nosotros, pues, debemos acoger a tales personas, para que cooperemos con la verdad.
¿Notaron el subrayado? "sin aceptar nada de los gentiles" es una aclaración de qué significa "vivir del evangelio". Significa que los que anuncian el Evangelio no deberían aceptar nada de los gentiles.
Vivir tiempo completo del ministerio es algo que Dios siempre reclamó para sus profetas y ministros. En Malaquías 3:10 Dios exige que haya alimento en Su casa. El alimento no es para él, pues Dios no tiene necesidad de alimentos, sino para el sostenimiento de sus predicadores. A lo largo de todo el Antiguo Testamento notamos que Dios siempre procura proveer para sus profetas y sacerdotes. Por medio de la ley y el sistema de ofrendas diseñado por Dios, la casta sacerdotal, aunque no poseía tierras, pertenecían a las clases sociales superiores. En el Nuevo Testamento, Dios procura que los pastores tengan un sueldo digno, multiplicado por dos (1 Tim. 5: 17-18).
Al llegar a este punto, debo aclararte que la verdadera clave para que puedas vivir tiempo completo del ministerio, no es todo lo que te acabo de exponer. El verdadero factor es:
QUE LO CREAS
La
verdad del asunto es que existe una gran mayoría de líderes que no
creen lo que acabo de exponer. Ellos creen que el pastor o el
misionero es una persona llamada a sufrir económicamente y es por
eso que las ofrendas mensuales misioneras que algunas iglesias envían
a sus misioneros, no superarían una propina de un país del primer
mundo. El problema es un problema de fe y de ignorancia. Yo entiendo que
en los
países donde hay persecución religiosa las condiciones para que un
pastor o misionero pueda vivir dignamente del evangelio, no son tan
sencillas como las que expliqué; pero en países donde sí hay
libertad religiosa y donde las iglesias pueden prosperar sin ser
molestadas, (es decir: en una situación que yo estimo normal)
deberían poder proveer lo suficiente para que el evangelio avance
rápidamente a través de líderes bien remunerados (tal como la Biblia
enseña) y efectivos (tal como las congregaciones necesitan). Pero
esto no se da, porque si aquellos que deben alimentar al rebaño no lo
creen, entonces no lo van a enseñar, y así entramos en un espiral
descendente que hace que la obra misionera se estanque.
La verdad del asunto es que la obra se hace con dinero, y ese dinero debe provenir del bolsillo de los feligreses, los que a su vez, deberían alegrarse de saber que pueden sostener a Su Pastor con una ofrenda mensual digna, y entristecerse cuando así no sucede. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que haciendo esto la congregación coopera con la verdad, y porque pesa sobre los predicadores una orden dada por Dios de que el que anuncia el Evangelio:
Debe vivir del Evangelio.
No debe enredarse en los negocios de esta vida.
No debe aceptar nada de los gentiles.
Al fin y al cabo, no es lo mismo un Pastor que trabaja ocasionalmente de albañil, porque necesita sostener a su familia, ... que un albañil que trabaja de Pastor.