Política, Leyes Y Religión
El Temor Del Neo Socialismo
"La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma..."
Salmo 19:7
Introducción
Recuerdo que durante mi niñez la siguiente frase se repetía con singular regularidad en las reuniones familiares o sociales de diversa índole: "De religión y de política no se habla". También recuerdo que durante el mundial de fútbol de 1978, año en que Argentina salió campeón del mundo (Perdón, pero lo tenía que mencionar), gobernaba de facto el General Jorge Rafael Videla. Yo cursaba el sexto grado de primaria, y en aquella aula repleta de guardapolvos blancos, la maestra nos anunciaba: "Abran la Constitución Nacional en la página 8, hoy veremos el artículo 14 bis".
¿No te suena interesante saber que un gobierno totalitario como el militar, nos enseñaba la constitución Nacional, mientras que el actual gobierno democrático argentino la erradicó de la primaria y secundaria?
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No puedo precisar el tiempo ni cuánto hace que comenzó a pasar. Yo creo que aproximadamente hace unos 70 años, se inoculó a la sociedad argentina con un pensamiento que fue aceptado y luego repetido por la población. La frase "No se habla ni de política ni de religión para que no haya discusiones", fue repetida hasta que quedó establecida como un regla de aceptación general.
Luego, por asociación, comenzamos a pensar que los religiosos tampoco deberían hablar de política, siendo que la feligresía está compuesta por un crisol de ideas políticas que nada tienen que ver con el sacrificio que Cristo hizo por nosotros en la Cruz. Es curioso que esto fuera aceptado naturalmente, en un país cuyo Dios es mencionado en el Preámbulo de su Constitución Nacional como fuente de toda razón y justicia; donde sacerdotes católicos fueron renombrados políticos sin necesidad de "colgar la sotana", partícipes activos en las luchas por la independencia y en la posterior organización nacional. Lo que ocurrió, es que el catolicismo abusó de dicho poder político hasta que Perón les plantó cara durante su mandato. A partir de entonces, los curas fueron vistos con otros ojos y estas ideas de corrección política "saltaron" al ámbito evangélico.
Recuerdo que cuando era niño, se veía muy mal que un pastor opinara de política, por lo que las ideas políticas fueron retiradas de éste ámbito eclesiástico también. ¿Cuál fue el resultado de eso? Que los seminarios e institutos dejaron la política de lado, olvidando que el Marxismo, el Leninismo y el Trotskismo son corrientes político-filosóficas ateas, destinadas a desplazar a Dios de nuestras vidas para entronizar al estado en su lugar. Comunismo, Nazismo y Fascismo, fueron corrientes políticas derivadas del socialismo, es decir de la izquierda atea y colectivista. Identificar estas corrientes dentro de la actual sociedad es fundamental para entender por qué un pastor no debería comulgar con el socialismo. A modo de ejemplo, citemos algunas frases modernas que son aceptadas en varios ámbitos cristianos, sin entender a qué corriente de pensamiento pertenecen. Por ejemplo:
Teoría de la evolución: Leninismo y Stanilismo
"Justicia social y estado presente": Socialismo
Regulación de la libertad de prensa: Fascismo
Revolución permanente: Trotskismo
Cuando hablo de "volver a la política" no estoy hablando de que un pastor debería dejar su oficio para rebajarse a ser Presidente de la Nación. No. Lo que estoy diciendo es que nuestros líderes deben ser enseñados en los seminarios a distinguir estas corrientes de pensamientos tan dañinas para la iglesia y lamentablemente tan aceptadas entre los pastores, por falta de discernimiento político. En los países comunistas, los pastores son los primeros que caen ante la persecución religiosa, pues las autoridades civiles entienden perfectamente el factor político relevante que ejercen (quieran o no) sobre la ciudadanía. Con respecto a este tema, como predicadores de la Palabra de Dios deberíamos aprender a señalar el pecado de Acab (1 Rey. 16:30), la maldad de David (2 Sam. 12:7) o la inmoralidad de Herodes (Mat. 14: 4,5); pero lamentablemente, se nos ha enseñado más a sujetarnos a las autoridades civiles, que a obedecer a Dios antes que a los hombres, por lo que ser perseguido, perder la cabeza, ir a la cárcel o recibir una multa por "meternos en política", no se encuentra incluido en el "Manual del buen pastor".
Es importante entender que todas las persecuciones al cristianismo, desde que Jesucristo estaba en la tierra hasta el día de hoy, nunca fueron por motivos religiosos, sino políticos. Los motivos religiosos siempre, sin excepción, fueron la excusa motivada por un interés político. Este dato nos ayuda a entender que necesitamos volver a la historia del cristianismo y reinterpretarla a la luz de las causas políticas, para escapar de esta "burbuja cristiana" que nos aleja más y más de la realidad y del pecado que asedia nuestras iglesias sin que lo advirtamos.
El análisis de la realidad a la luz de las corrientes filosóficas políticas actuales, nos ayudará a entender la importancia del siguiente punto:
Las Leyes De Los Hombres
El estudio de la Constitución Nacional y de algunas leyes civiles, deberían ser parte de la preparación de todo aquel que supuestamente ejercerá el pastorado.
Detrás de cada ley, hay una historia y una ideología política. Como ya escribí en la semblanza de la vida de Pablo Bessón (ver haciendo click aquí ), este hombre, considerado como el padre de los Bautistas en Argentina, debió ejercer presión política mediante varios artículos en los periódicos y contactos en el poder, para que la ley de cementerios públicos y del registro civil, tuviera aplicación universal. Hoy le rendimos tributo y agradecemos la manera en que fue usado por el Señor, sin embargo, nos olvidamos de las acciones políticas que debió realizar para que la ley fuera aprobada, lo que requirió de un conocimiento profundo del sistema legal argentino.
Como pastores necesitamos conocer, entender y usar las leyes que como ciudadanos nos protegen. Saber dónde hacer una denuncia de violencia doméstica, cómo aconsejar en caso de abusos, qué opciones legales existen para proteger a un menor de padres abusivos, etc.
Notamos en las Escrituras cómo el Apóstol Pablo una y otra vez, utilizó sus conocimientos legales y los usó invocándolos como ciudadano romano, cada vez que las circunstancias lo ameritaban. ¿Por qué entonces, no hacer lo mismo nosotros?
Por supuesto que Pablo no fue el único que invocó las leyes de los hombres durante su ministerio. Tenemos varios ejemplos, como Daniel, durante el reinado de Nabucodonosor o el de Darío, el de Mardoqueo y Ester, Salomón, David, etc. Al examinar dichos ejemplos, apreciamos cómo el Señor usó las leyes de los hombres para que sus propósitos se cumplieran, o cómo los judíos lucharon en contra de leyes injustas que los perseguían, como en el caso de Ester y de Daniel.
Conclusión
La corrección política dice que un clérigo o pastor no debería emitir opiniones políticas, ya que debería dedicarse a las cosas espirituales, dejando las terrenas a los políticos. Sin embargo, este razonamiento es bíblicamente incorrecto.
Nunca las Escrituras hacen este tipo de distinciones, todo lo contrario. Nos indica que lo que hacemos en la tierra, tiene un efecto en "el cielo" (Mat. 18:18; Apoc. 14:13 y 20:12; Luc. 16:25), y aunque como pastores debemos dedicarnos al cuidado de la iglesia, tenemos que entender que dicho cuidado debe ser integral y no parcial, estando capacitados para cubrir, lo mejor que podamos, todos los aspectos de la vida humana en sociedad.
Como líderes debemos advertirle a nuestra gente, señalando los pecados de quienes nos gobiernan, cuando éstos afectan públicamente a la población. ¿Por qué? ¡Porque es parte de nuestro trabajo! Esos son los ejemplos que vemos en los profetas antiguo testamentarios o en los mismos apóstoles al enfrentarse abiertamente a los gobernantes de la época.
Los pastores somos considerados por los pensadores socialistas, como agentes políticos determinantes en su lucha revolucionaria. La mejor manera de anularnos, es crear la ilusión de que no lo somos, haciéndonos creer que no tenemos el derecho, ni siquiera como ciudadanos, de emitir opiniones políticas; y lo lograron.
El mayor temor de esta avanzada Neo socialista, es que los líderes cristianos del mundo despierten de su letargo y comiencen a influir políticamente sobre sus congregaciones, enseñando a la feligresía que el voto también debe ser considerado como un acto espiritual.
Es muy interesante leer en Hechos 5:34-39, como el sabio maestro de la ley, llamado Gamaliel, hace un razonamiento histórico político para concluir: "no seáis tal vez hallados luchando contra Dios".
Tener una comprensión política y legal de nuestro entorno, nos ayudará a evitar que nuestra gente, se encuentre frente a una urna, votando contra Dios.